Ojo al dato señores! : Aleandro Rosi
Diamante en bruto el que tiene la Roma en sus filas. El nuevo "De Rossi" (parece mentira como un jugador de 23 años pueda tener sucesor a su corta edad) juega en el mismo equipo que el mundialista experto en malas artes (que se lo digan a Brian McBride).
Aleandro Rosi (con una sola "s") es uno de los jóvenes valores de la prolífica cantera romanista de la que destacan en la presente plantilla nombres como los de Stefano Okaka, Daniele Corvia, Alessio Cerci, Alberto Aquilani, Andrea Briotti o los archiconocidos Francesco Totti y el mismo Daniele De Rossi.
Este centrocampista es una de las más firmes promesas en la medular del fútbol italiano. A sus 19 años, Rosi ya lleva dos temporadas como miembro del primer equipo romanista. Su debut se produjo el 29 de mayo de 2002 en un Roma 0 - Chievo 0. Ese fué el único partido en el que tomó parte Aleandro, aunque la siguiente temporada las cosas cambiarían y serían 20 los encuentros en los que tomara parte, 17 de liga y 3 de UEFA (aunque únicamente 4 fueron como titular).
Luciano Spalletti, técnico de la Roma, es uno de los más firmes avaladores de Rosi y cuenta con él como complemento ideal de los Perrotta, Taddei, Mancini, De Rossi o Cassetti. Jugador polivalente, Aleandro Rosi es un comodín en el centro del campo, actuando preferentemente pegado a la banda diestra aunque puede actuar perfectamente en la banda izquierda, jugando un rol preferentemente ofensivo. En la selección italiana sub-19 ha llegado a ocupar la demarcación de medio centro "stopper". Rosi es un jugador alto, con una estampa similar a la del jugador atlético Pablo Ibáñez o a la del bético Damià por lo que el juego aereo no tiene secretos para él. Además posee una gran técnica individual y un potente disparo.
La trayectoria de Aleandro Rosi se asemeja un tanto a la del madridista "Raúl" (formado de chaval en el Atlético y acabado de perfilar en el Real Madrid, dando el salto al primer equipo al poco tiempo de su llegada). Rosi empezó a dar patadas al balón en la Lazio aunque la Roma le fichó con 16 años. Pese a su pasado "laciar", podría convertirse en el nuevo ídolo de la afición romanista si su progresión sigue en aumento. Clase le sobra y ante sí se abre un brillante futuro.
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