Mercato : Franck Ribéry

Ya es oficial. Franck Ribéry será jugador del Bayern de Munich las próximas 4 temporadas. Tras saltar la noticia en los medios el pasado martes tan solo faltaba la oficialización por parte de alguno de los dos clubs, vendedor o comprador. Finalmente el Olympique de Marsella anunciaba a través de su web oficial el acuerdo entre ambas entidades para el traspaso de Ribéry, que será presentado en Múnich en los próximos dias junto al delantero italiano Luca Toni.
El Bayern se gastará en el fichaje de Ribéry los 25 millones de euros recibidos en concepto de traspaso de Owen Hargreaves al Manchester United.

Mucho se había especulado acerca del futuro de Franck Ribéry. Real Madrid, Arsenal o Olympique de Lyon eran firmes candidatos a hacerse con sus servicios. La clasificación del Olympique de Marsella para la próxima edición de la Liga de Campeones parecía frenar las intenciones del jugador de dejar el subcampeón francés, pero las suculentas ofertas llegadas han hecho que Pape Diouf, presidente del OM, accediera a un nuevo traspaso multimillonario de uno de sus mejores futbolistas, tal y como hizo en su dia con otro de sus estandartes, el delantero Didier Drogba, que recaló en verano de 2004 en el Chelsea por 36 millones de euros.

Franck Ribéry, nacido en Boulogne-sur-Mer hace 24 años, cumplía su segunda temporada en el Olympique de Marsella.
Formado en el US Boulougne, Ribéry debutó como profesional en el Olympique Alès en 2002. En julio de 2003 firmó por el Stade Brest, donde completó una muy buena temporada que le valió firmar por el FC Metz, debutando en Ligue 1 en la temporada 2004/05.
Ribéry continuó con su buena progresión y su buena actuación en los 20 partidos jugados (con 2 goles marcados) despertaron el interés del Galatasaray turco, que le fichó en el mercado de invierno de 2005 por 2'5 millones de euros. En Istambul jugó solo 6 meses, disputando 14 partidos y ganando la Copa de Turquía. En junio de 2005 fichaba por el Olympique de Marsella. En su vuelta a Francia jugó 35 partidos de liga (6 goles) y 7 de UEFA (1 gol), llevando al OM a la final de la Coupe de France que acabó perdiendo ante el PSG.
Ribéry completó una sensacional temporada en el plano individual que le llevó a ser convocado por Raymond Domenech a la selección francesa para debutar, nada más y nada menos que en el Mundial de Alemania. Franck fué titular en todos los partidos (7 y un gol a España en octavos de final) y su "caché" aumentó de forma megalítica. Ribéry se daba a conocer de forma global y Marsella tenía todos los números de verle partir en muy poco tiempo, quedándosele pequeño ante la avalancha de interés por parte de algunos "grandes" europeos. Acabado el Mundial Ribéry decidió permanecer en Marsella una temporada más. Pero la suerte no le ha acompañado y una lesión le ha tenido apartado de los terrenos de juego varios meses. Franck ha acabado jugando 25 partidos de liga (5 goles) y 2 de UEFA y su ausencia la ha notado, y mucho, su equipo, que perdió distancia respecto al Olympique de Lyon en liga en el tramo en que el centrocampista francés estuvo de baja. Su vuelta a los terrenos de juego ayudó a que el equipo encarrilara su clasificación para Liga de Campeones acabando en una decente segunda posición del campeonato.

La historia de Ribéry se aleja de la de otros futbolistas de primer nivel. Franck ha tenido una infancia muy difícil, que le ha curtido de forma sobrenatural y le ha convertido en un infatigable luchador. Finalmente ha recibido el premio que la vida le quitó en su niñez.
Nacido en el seno de una família humilde en un barrio obrero y profundamente degradado, sufrió un accidente de tráfico a los dos años que le dejó secuelas para toda la vida. El parabrisas del coche en el que circulaba le cortó la parte derecha de su rostro, dejándole una marca (hoy en dia es evidente y notoria) que le llevó a la contínua burla y marginalidad por parte del resto de niños, que le apodaron "caracortada". Ribéry ayudaba a su padre en el mantenimiento de las carreteras y dejaba de lado los estudios. Afortunadamente el fútbol le sirvió de via de escape y hoy en dia su talento es disfrutado por miles de aficionados.
En su paso por Turquía se convirtió al islam tratando de buscar la paz espiritual que su pasado imposibilitaba. La encontró y se encontró a sí mismo. Franck pasó a ser "Bilal" (su nombre ante Alá) y se casó con una chica argelina con la que ha tenido una hija. En una entrevista a "Paris Match" declaraba que nunca se haría la cirugía estética. Si se la hacía ya no sería él mismo.

En el plano futbolístico hay poco que contar. Ribéry es un sensacional futbolista. Un incansable medio, técnico y "cariñoso" con el balón y duro y aguerrido en su recuperación. Rápido, resistente, con un guante en su pie derecho y una privilegiada visión de juego. Un futbolista muy completo y polivalente, capaz de descolgarse a cualquiera de las dos bandas, penetrar por el centro, hacer circular el balón a la contra o sumarse a la delantera como un punta más. Solo le falta altura (mide 1'74 m.) para dominar el juego aereo, su única asignatura pendiente. El tándem con Samir Nasri hacía sacar los "baberos", creando fútbol en estado puro. Nos queda la selección francesa, lugar en el que nos deleitaremos viendo unido, de nuevo, a un duo de "peloteros" como ninguno.
El Bayern completa un excelente fichaje. Un jugador que tratará de hacer olvidar a Hargreaves y que, junto a Luca Toni y Hamit Altintop, completan tres buenos substitutos de los ausentes Salihamidzic (Juventus), Pizarro (Chelsea) y el mismo Hargreaves (Manchester United).