Los rivales de los españoles : Glasgow Rangers

Si antes del sorteo habia un "caramelo" con el que todos querian quedar emparejados ese era el Rangers escocés. Segundo de su grupo, el equipo entrenado por Alex McLeish le ha caido en gracia al Villareal, al que tan solo la inexperiencia de entrar en similar ronda podría apearle de cuartos de final ya que, por calidad, no debe pasar demasiados apuros para pasar.
El Rangers se encuentra en una situación poco común en la Premier escocesa. Quinto a 17 puntos del Celtic los protestantes parecen haber caído en octavos de la Champions casi por casualidad, beneficiados por un grupo en el que el debutante Artmedia dió más guerra que el campeón hace 2 temporadas, el Oporto, y eso les dió el billete para la siguiente ronda de puro rebote.
Lo más peligroso del Rangers consiste en lo menos futbolístico del equipo : su estadio. Ibrox Park como los grandes estadios británicos vibra en partidos como el que disputarán el próximo 22 de febrero. 50.000 gargantas que pueden atemorizar a unos jugadores poco acostumbrados a ambientes tan febriles. A nivel puramente futbolístico el Rangers deja mucho que desear, más aún por la presencia de jugadores de suficiente calidad como para no atravesar la posición que ocupa en la tabla.
Destacar a Thomas Buffel, centrocampista belga procedente del Feyenoord, Dado Prso, delantero croata procedente del Mónaco, el danés Peter Løvenkrands y el español Nacho Novo, pese a que este último no está teniendo la presencia que tuvo la pasada campaña en la que se convirtió en el goleador de moda en escocia, protagonismo que compartió con el galés del Celtic John Hartson.
El Rangers juega un fútbol agresivo, donde prevalece el físico por encima de la calidad y la construcción de juego, dejando la posesión del esférico al rival y saliendo a la contra. En este aspecto el Villareal sufrirá especialmente en Glasgow, donde seguramente la linea de medios se poblará ahogando la construcción de Riquelme que repercutirá en los balones que éste pueda nutrir a los puntas. Un empate en el partido de ida no sería un mal resultado para los castellonenses ante un partido aguerrido, aunque cualitativamente el equipo español está muy por encima y en El Madrigal no deberia tener problemas y sentenciar la eliminatoria.
Suerte a priori aunque jamás sin confiarse en exceso, más aún jugando el primer partido fuera de casa, circumstancia que podría llegar a ser contraproducente en caso de resultado negativo.