Mundial 2006, analisis de las selecciones (III) : Suiza

Footgol apuesta por Suiza. Por equipo y por calendario, el equipo suizo puede dar una grata sorpresa en este mundial. Encuadrado en un grupo más que asequible, el equipo entrenado por "Köbi" Kuhn deberá medirse a Francia, Togo y Corea del Sur, con claras opciones de lograr el primer puesto de grupo, situación muy al alcance del combinado alpino. Posteriormente se vería las caras con el primer o segundo clasificado del grupo H, el de España, donde hipotéticamente se debería medir con el equipo de Luis Aragonés si el fútbol fuera un deporte matemático y España finalizara la primera fase como líder de grupo y Suiza segunda del suyo. Pero en un mundial todo es posible y dándole el beneficio de la duda a España y ubicándola líder de grupo, apostar por Suiza como líder del suyo no es ninguna locura, con lo que un cruce frente a Ucrania (favorito respecto a Túnez o Arabia) sería un auténtico regalo que podría catapultarle a cuartos, donde el rival tendría una entidad mucho mayor y el avance en la competición sería mucho más complicado.

Suiza ha aglutinado un equipo de mucha calidad. Con jugadores repartidos por varias ligas importantes como la italiana, francesa o alemana, Kuhn dispone de una plantilla muy compensada y capaz de hacer un buen fútbol pese a la dificultosa calificación para el mundial, donde quedó por debajo de Francia (con la que empató en ambos choques) y empatada a puntos con Israel, aunque el mejor goal average les llevó a la repesca donde eliminaron a Turquia tras un partido de vuelta en Istambul plagado de incidentes, agresiones al término del encuentro incluídas.
La lista de convocados deja poco márgen a sorpresas y la práctica totalidad de los 23 jugadores es de sobras conocida antes de su oficialidad. Esta es la lista con mayores opciones de convertirse en definitiva :

Porteros
Pascal Zuberbühler (32 años, Basilea)
Fabio Coltorti (25 años, Grasshoppers)
Eldin Jakupovic (21 años, Lokomotiv Moscú)

Defensas
Ludovic Magning (27 años, Stuttgart)
Stéphane Grichting (27 años, Auxerre)
Christoph Spycher (28 años, Eintracht Frankfurt)
Patrick Müller (29 años, Olympique Lyon)
Philippe Senderos (21 años, Arsenal)
Philipp Degen (23 años, Borussia Dortmund)
Stephan Lichtsteiner (22 años, Lille)
Boris Smiljanic (29 años, Basilea)

Centrocampistas
Johann Vogel (29 años, Milan)
Ricardo Cabanas (27 años, Colonia)
Raphael Wicky (29 años, Hamburgo)
Tranquillo Barnetta (20 años, Bayer Leverkusen)
Daniel Gygax (24 años, Lille)
Valon Behrami (20 años, Lazio)
Benjamin Huggel (28 años, Eintracht Frankfurt)
Hakan Yakin (29 años, Young Boys Bern)

Delanteros
Alexander Frei (26 años, Rennes)
Marco Streller (24 años, Colonia)
Johan Vonlanthen (20 años, NAC)
Mauro Lustrinelli (30 años, Sparta Praga)

La veteranía y sobriedad de hombres como Müller, Vogel y Zuberbühler y la juventud, frescura y explosividad de hombres como Behrami, Vonlanthen, Degen o Senderos le da mucho equilibrio a esta formación. Defensivamente el equipo deberá rendir a un nivel muy superior al que debería, puesto que el centro del campo no ofrece demasiado apoyo en tareas defensivas con jugadores de corte muy ofensivo. Vogel y Wicky se ocuparán de dicha tarea formando un doble pivote en la medular y complementando una linea defensiva con un Senderos que debería ser titular junto a Müller en el eje de la defensa, con Degen y Magnin en los laterales.
En ataque Barnetta y Behrami serían los interiores mientras que el referente en ataque debería ser Frei, acompañado de Streller como pareja de ataque a no ser que Kuhn prefiriera armar con un hombre más el centro del campo, situación que daría entrada a Cabanas o Gygax en la media punta y dejaría solo al delantero centro del Rennes.

La duda se centrará en la inclusión de jóvenes valores como el lateral izquierdo Alain Rochat (23 años, Rennes), del carrilero zurdo Reto Ziegler (20 años, Wigan Athletic), del medio centro Blerim Dzemaili (20 años, FC Zürich) o del polivalente defensa y medio defensivo Johan Djourou (19 años, Arsenal). Lo cierto es que la cantera Suiza está dando muy buenos frutos que, ya sea en este mundial como en posteriores competiciones, muy seguramente darán el rendimiento adecuado.
En un mundial en el que ninguna de las grandes selecciones (Brasil al margen) parecen presentar grandes credenciales al título y vista la experiencia de hace 4 años en Japón y Corea, las sorpresas han de estar al orden del día y, porque no, Suiza puede ser el protagonista de una de ellas. La solución el 13 de junio en Stuttgart, punto de partida de la selección suíza en el mundial. Su rival, el más peligroso del grupo. La Francia de Henry y Zidane. Toda una potente piedra de toque con la que empezar a valorar las opciones del equipo en la cita mundialista.